Internet y las relaciones familiares

Internet ha cambiado significativamente la forma en que las personas viven y trabajan, y muchas familias ahora dependen de las herramientas digitales para la comunicación, el empleo, la educación y el entretenimiento. Las herramientas de comunicación digital como Facebook y el correo electrónico pueden ayudar a las familias a ahorrar tiempo y dinero al comunicarse con amigos y familiares, y simplificar la comunicación cuando las familias están separadas. Internet puede permitir a los padres teletrabajar, trabajar en casa mientras crían hijos pequeños y acceder fácilmente a experiencias de aprendizaje.

Desafortunadamente, estudios recientes también sugieren que Internet puede tener efectos negativos en las relaciones familiares. El alto uso de Internet puede llevar a conflictos entre padres y adolescentes por la falta de habilidades sociales de los adolescentes y puede significar que las personas descuiden sus relaciones familiares. El uso frecuente de pornografía en línea o participar en aventuras en línea puede poner en peligro las relaciones de pareja. Aunque la infidelidad en las relaciones no es nueva, las relaciones en línea pueden desarrollarse más rápidamente debido a la disminución de las inhibiciones, la falta de señales físicas y la facilidad para intercambiar información.

El uso de las redes sociales puede generar sentimientos positivos de conexión, pero alternativamente aumenta los sentimientos de soledad y el vacío de conexiones ilusorias, falsas o superficiales. Internet también puede facilitar que una persona aceche o intimide a otra persona, o que haga comentarios personalmente dañinos que una amplia audiencia pueda leer instantáneamente.

En una encuesta reciente, los problemas de relación comúnmente citados relacionados con los impactos negativos de las herramientas de comunicación digital incluyeron:

  • uso de pornografía en Internet, cibersexo y sitios de citas y apuestas en línea;
  • miembros de la pareja que recurren al uso de tarjetas SIM secretas y direcciones de correo electrónico para mantener infidelidades;
  • acecho, control y seguimiento en línea de los correos electrónicos y mensajes entre los miembros de la pareja;
  • piratear las cuentas de Facebook de exparejas; y
  • uso de internet y tecnología con exclusión de la pareja.

Los resultados de la encuesta de practicantes revelaron:

  • El 80 % de los encuestados había asesorado a clientes que habían planteado inquietudes sobre el impacto de Facebook en sus relaciones.
  • El 72 % había encontrado preocupaciones sobre el correo electrónico.
  • El 50 % se había encontrado con inquietudes acerca de los dispositivos de Internet móvil, los blogs y los foros.